Lucas Tagle, exalumno del Colegio Oakhill Pilar, participó junto a otros 30 jóvenes en esta actividad que organizó la localidad de Pilar. “Fue un regalo de Dios que me abrió un poco más los ojos y me hizo sentir amado”, reflexiona sobre su experiencia en misiones. Aquí su testimonio.
La misión se llevó a cabo del 22 al 30 de julio, en la ciudad de General Rodríguez. En ella participaron 30 universitarios, quienes por las mañanas hicieron puerta a puerta y organizaron un campamento para los niños del lugar. En las tardes, José Mateos, laico consagrado del Regnum Christi les dio un curso sobre Teología del Cuerpo.
Testimonio de Lucas Tagle
Para mí, la experiencia de la misión de invierno fue única e irrepetible. Venía muy acostumbrado a un estilo de misión muy distinto al que vivimos este julio, pero la verdad que Dios hizo un trabajo de una manera muy enriquecedora.
Desde el grupo de misioneros hasta la colonia con los chicos de Granaderos, TODO fue un regalo de Dios que me abrió un poco más los ojos y me hizo sentir amado. Disfruté mucho la misionada a la tarde y la colonia a la mañana con los niños, una gran idea en la que se notó cómo cada uno de los misioneros iba con todo el amor que tenía a compartirle a los demás quién fue Jesús. Durante la misionada me sentí muy cómodo en todo momento, la gente del barrio nos recibió de brazos abiertos, compartiéndonos lo que tenían ¡como si fuera nuestro!
Hermosas charlas me llevo de recuerdo en mi corazón. Y finalmente los talleres de Teología del Cuerpo, puertas adentro, lo que fue una experiencia espectacular. Un tema muy inexplorado y con muchísimo para aprender. Que lindo que somos reflejo de un amor mucho más grande y saber que fuimos amados, pensados, protegidos y creados por un Dios que jamás nos va a dejar de lado. ¡Le agradezco y rezo mucho por todos los que hicieron posible esta misión! Especialmente a los padres y consagradas del Regnum Christi que siempre están ahí para nosotros ¡Cristo Rey Nuestro!
