Regresó a Salta el 2 de junio, después de su ordenación sacerdotal en Roma, y su paso por México. El viernes 10, de este mes, el padre Jesús celebró su cantamisa (primera misa) en el Colegio Instituto Humanista Santísima Trinidad. “Creo que uno de los principales desafíos de cara a los jóvenes es ser capaz de transmitir la belleza de la fe”.
El viernes 10 de junio fue sin duda un día de fiesta en el Instituto Humanista Santísima Trinidad: era el día del colegio, ya que era el viernes previo a la solemnidad de la Santísima Trinidad, y se celebró la cantamisa (primera Misa) del Padre Jesús – Raziel Guerrero L.C. “Me ha impresionado cómo los jóvenes valoran el don del sacerdocio, por eso celebré una cantamisa con ellos”, afirma. En su homilía, abordó a la Santísima Trinidad: “pude compartir con ellos cómo Dios, al ser tres personas, nunca ha estado sólo, ni tampoco nos deja sólo a nosotros. Y por lo mismo, es un Dios que se comunica y llama a cada uno a través de la vocación personal”.
El domingo 12, el padre Jesús celebró una Misa junto a los jóvenes en el Centro de Espiritualidad, con quienes luego compartió un convivio. “Creo que uno de los principales desafíos, de cara a los jóvenes, es ser capaz de transmitir la belleza de la fe”, concluye.